Oración Al que lo es Todo:
Una Oración a Cristo
Oración que nos lleva a la contemplación y adoración de Jesús como aquel que es suficiente.
Querido Señor, ayúdame a mantener mis ojos en ti. Tú eres la encarnación del Amor divino, Tú eres la expresión de la compasión infinita de Dios, Tú eres la manifestación visible de la santidad del Padre.Tú eres la belleza, bondad, gentileza, perdón y misericordia.
Se puede encontrar todo en ti. Fuera de ti nada se puede encontrar. ¿Por qué debo buscar en otra parte, o ir a otro lugar?
Tú tienes las palabras de la vida eterna, Tú eres Alimento y Bebida, Tú eres el camino, la Verdad y la Vida. Tú eres la luz que brilla en la oscuridad, la lámpara del velador, la casa en la cima de la colina. Tú eres el icono perfecto de Dios. Puedo ver al Padre celestial en y a través de ti, y contigo puedo encontrar el camino hacia Él.
Oh Santo, Hermoso, Glorioso, sé mi Señor, mi Salvador, mi Redentor, mi Guía, mi Consolador, mi Reconfortador, mi Esperanza, mi Alegría y mi Paz.
Quiero darte todo lo que soy. Permíteme darte todo, todo lo que tengo, pienso, hago y siento. Es tuyo, oh Señor. Por favor, acéptalo y hazlo completamente tuyo. Amén.
Querido Señor, ayúdame a mantener mis ojos en ti. Tú eres la encarnación del Amor divino, Tú eres la expresión de la compasión infinita de Dios, Tú eres la manifestación visible de la santidad del Padre.Tú eres la belleza, bondad, gentileza, perdón y misericordia.
Se puede encontrar todo en ti. Fuera de ti nada se puede encontrar. ¿Por qué debo buscar en otra parte, o ir a otro lugar?
Tú tienes las palabras de la vida eterna, Tú eres Alimento y Bebida, Tú eres el camino, la Verdad y la Vida. Tú eres la luz que brilla en la oscuridad, la lámpara del velador, la casa en la cima de la colina. Tú eres el icono perfecto de Dios. Puedo ver al Padre celestial en y a través de ti, y contigo puedo encontrar el camino hacia Él.
Oh Santo, Hermoso, Glorioso, sé mi Señor, mi Salvador, mi Redentor, mi Guía, mi Consolador, mi Reconfortador, mi Esperanza, mi Alegría y mi Paz.
Quiero darte todo lo que soy. Permíteme darte todo, todo lo que tengo, pienso, hago y siento. Es tuyo, oh Señor. Por favor, acéptalo y hazlo completamente tuyo. Amén.